Alistair Dutton, Secretario General de Caritas Internationalis, concluyó una visita de dos días a Ucrania y subrayó la necesidad de cambiar la asistencia ofrecida por la organización humanitaria de la Iglesia, en vista al impacto psicológico de la guerra en la población.
“Vivir en tiempos de guerra se está convirtiendo en algo cotidiano para la población de Ucrania. Por eso, la naturaleza de la ayuda está empezando a cambiar un poco”.
Alistair Dutton, Secretario General de Caritas Internationalis, concluye su visita a Ucrania, donde se ha reunido con representantes de Caritas Ucrania y Caritas Spes para llevarles apoyo y reconocimiento por su labor.
Hablando desde un hotel situado a media hora al sur de Kiev, donde se ha reunido con la dirección y el personal de Cáritas en el país, Dutton explicó la colaboración entre ambas organizaciones (Cáritas Ucrania es la Cáritas greco-católica de Ucrania y Cáritas Spes es la católica romana), y destacó su deseo de expresar solidaridad, cercanía y gratitud a todos los colaboradores y voluntarios “por todo lo que han hecho desde que empezó la guerra, que es realmente increíble”.
Desde el inicio del conflicto, el 24 de febrero de 2022, las dos organizaciones han atendido a más de 3 millones de personas, aumentando “la escala y el alcance de sus programas de forma espectacular para responder a la situación del país y a la de su población”.
Durante este periodo, la ayuda se centró en dar “una respuesta inicial a las personas que huían de las zonas donde los combates han sido más intensos”.
Cáritas, prosiguió el Secretario General, también ha estado ayudando a “personas tanto a establecerse en otras ciudades del país como a abandonar Ucrania y trasladarse a terceros países seguros” como Polonia u otros países vecinos y otros lugares de Europa.
“Pero ahora que llevamos 18 meses de guerra, por desgracia, la guerra se está haciendo más presente estructuralmente”.
Según Dutton, el conflicto “no está cambiando ni de lejos tan rápidamente como en los primeros días. Y vivir en tiempos de guerra se está convirtiendo en algo cotidiano para los ucranianos. Así que la naturaleza de la ayuda está empezando a cambiar un poco”.
“Vivir en tiempos de guerra se está convirtiendo en algo cotidiano para los ucranianos”.
Concretamente, esto significa ayudar a las personas cuyas “casas se pueden reparar para que puedan vivir en ellas”, y esto puede significar “sustituir ventanas o puertas o pequeñas reparaciones en paredes o tejados”, cuando sea posible.
También es esencial para el pueblo ucraniano, dijo, recordando el llamamiento del Papa Francisco, “no acostumbrarse a la guerra”.
“Debemos ayudar a la gente a pensar, más que en lo que reciben día tras día, en cómo mantener a sus familias. Cómo pueden retomar su trabajo y obtener ingresos y mantener ellos mismos a sus familias”.
Uno de los mayores temores es el posible estancamiento de la economía. Por eso, explicó Dutton, es crucial apoyar a las personas para que se vuelvan “económicamente activas” y adquieran una independencia que les dé la oportunidad de “volver a ocuparse de sus familias, para que no dependan tanto de la asistencia alimentaria u otro tipo de ayuda que hemos estado prestando”.
En cuanto a las impresiones y la moral de los ucranianos, Dutton señaló una sensación de cansancio y agotamiento, ya que la guerra “pasa factura psicológica” a la gente.
En cuanto a la actitud hacia la reconstrucción, el Secretario General de Caritas Internationalis admitió que “no estamos ni siquiera cerca de pensar realmente en la reconstrucción. Eso será algo que ocurrirá en gran medida cuando hayamos alcanzado la paz y la gente pueda empezar a pensar en un futuro a mucho más largo plazo para sí misma”.
Al concluir su visita a Ucrania, Dutton destacó “la fuerza, la resistencia y la esperanza de los miembros de Cáritas presentes en el país y de todo su personal”.
“Como digo, los programas ahora se centran en actividades un poco más a largo plazo, en cómo ayudar a la gente a reiniciar sus vidas en la medida de lo posible, pero obviamente tienen que mantener constantemente esa intención con el hecho de que están siendo atacados por Rusia, particularmente en el Este”.
Otras implementaciones a la ayuda proporcionada por Caritas se destinarán al desarrollo de mejores conexiones entre “los miembros de Caritas en todo el mundo para que nosotros, como Caritas Internationalis, y los miembros de Caritas en todos los países, podamos realmente ayudarles a construir una respuesta más sólida, más amplia y mejor para el bien de todas las personas a las que sirven”.
Dutton concluyó con tres llamamientos, a distintos niveles.
El primero fue una exhortación a rezar “por la paz y la reconciliación” en Ucrania. “La guerra, como tantas veces dice el Papa Francisco, es siempre un fracaso. En definitiva, la paz es la respuesta, y eso será lo que permitirá a la gente volver a la normalidad”.
En segundo lugar, Dutton subrayó cómo la comunidad internacional debe seguir trabajando sin descanso por la justicia y la paz. “Y que, en ese contexto, esto debe significar que el pueblo ucraniano no sea arrollado, pero al mismo tiempo, que se pueda restablecer la paz dentro de su país”.
Por último, pidió a todos los lectores y oyentes que apoyen a la “familia de Cáritas en Ucrania: será necesario durante mucho tiempo, y mantener la financiación para ello va a ser uno de nuestros mayores retos”.
Para más información sobre los proyectos de Caritas y para hacer donativos, visiten la página web de Caritas Internationalis.
Fuente: www.vaticannews.va/es / Imagen: Pexels.