Un material de apoyo adaptado a las necesidades de los pueblos indígenas y originarios, así como la creación de una estrategia para contribuir a la fase continental del Sínodo; es la propuesta para los obispos del continente presentada por la Comisión de Pastoral Indígena que actualmente hace parte del CELAM desde el Centro de Programas y Redes de Acción Pastoral.
El material y la estrategia que estarán conectados con la planeación del Consejo Episcopal Latinoamericano buscan reforzar la convocatoria y la metodología de la escucha sinodal, motivando la participación activa de los pueblos indígenas y originarios, porque como se lee en la carta «es fundamental que asumamos con decisión y valentía la invitación para experimentar la Comunión, Misión y Participación de todos los fieles y miembros que componen nuestras iglesias locales».
UN LUGAR PARA TODOS
Para la Comisión de Pastoral Indígena, será vital que en los meses de mayo, junio y julio se refuerce la convocatoria para que todo el pueblo de Dios participe. Igualmente anima a los obispos del continente para que su presencia, no solo consista en asistir a un evento, sino que se vea reflejada en lo que definen como una verdadera «praxis sinodal», es decir, que como pastores atiendan las reflexiones de la gente, promoviendo una implicación real de todos, facilitando la comunión y misión que todos compartimos como pueblo de Dios.
La recomendación de la Comisión de Pastoral Indígena es que se entregue a la gente el lugar que hasta el momento se le ha negado por aspectos como el desconocimiento o el temor que impide descubrir y valorar su particularidades.
«Solo escuchando a todo el pueblo de Dios, en toda su diversidad cultural y espiritual, seremos capaces de escuchar la voz del Espíritu». afirman en el mensaje firmado por los representantes de la Comisión: Monseñor José Hiarís, obispo de Huejutla, y el Cardenal Felipe Arizmendi, obispo emérito de San Cristóbal de las Casas, junto al Padre Pedro Brassesco, secretario general adjunto del CELAM, y Mauricio López, director del Centro de Programas y Redes de Acción Pastoral.
LOS DESAFÍOS POR ASUMIR
En el mensaje, la Comisión recuerda que acompañar a los pueblos originarios y afrodescendientes en la defensa de la vida, la tierra y las culturas es uno de los desafíos planteados por la reciente Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe; por eso, es necesario continuar con los esfuerzos que garanticen una escucha real y adecuada de los grupos que se encuentran en los márgenes sociales y culturales; particularmente todos los pueblos indígenas que hacen parte de los espacios asamblearios y locales.
Frente al desarrollo de este proceso, indican que en algunos casos las estrategias empleadas para la sistematización de los aportes pueden recortar e invisibilizar la palabra de los pueblos, por eso, es necesario garantizar la presencia protagónica o activa de los líderes y miembros de las comunidades en los diversos espacios de diálogo, dando continuidad tanto al Sínodo Amazónico como a la misma Asamblea Eclesial.
APORTES DESDE LOS PUEBLOS ORIGINARIOS
Así, el Consejo Episcopal Latinoamericano busca contribuir para que los aportes desde los pueblos indígenas y originarios lleguen de un modo más explícito y puedan ser acogidos y valorados pensando en enriquecer la Iglesia con valores sinodales que se encuentran presentes en nuestros pueblos.
Finalmente retoman las palabras del Santo Padre, según las cuales es preciso reconocer que el Sínodo no es un evento específico, ni un sondeo de opiniones, sino que es un momento eclesial, donde el principal protagonista es el Espíritu Santo expresado en los dolores, esperanzas y sueños de su pueblo.
Fuente: https://prensacelam.org