Suscríbete a Revista Mensaje y accede a todos nuestros contenidos
Comienza tu suscripción gratuita por 5 días
El inédito encuentro de obispos convocado por el papa Francisco trabajó en febrero en la búsqueda de nuevas prácticas y modos que erradiquen la cultura eclesial, hegemónica durante muchas décadas en la Iglesia católica, de silencio, negligencia y ocultamiento. El largo camino que se ha emprendido, será doloroso, pero sin pausa y con decisión. Hay conciencia de que fueron relegadas las víctimas y su dolor. Este dolor nunca prescribe y durante mucho tiempo fue ignorado, callado o silenciado.