1
Step 1
¡Las mujeres estuvieron en la Ascensión del Señor, y es necesario hacer justicia con ellas!
Domingo, 21 de mayo de 2023
Evangelio de nuestro Señor Jesucristo, según San Mateo 28, 16-20.
En aquel tiempo, los once discípulos fueron a Galilea, a la montaña donde Jesús los había citado.
Al verlo, se postraron delante de él; sin embargo, algunos todavía dudaron.
Acercándose, Jesús les dijo: “Yo he recibido todo poder en el cielo y en la tierra. Vayan, y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándoles a cumplir todo lo que yo les he mandado. Y yo estaré siempre con ustedes hasta el fin del mundo”.
Este domingo la Iglesia celebra la Ascensión del Señor. Jesús vuelve al Padre (y Madre Dios), es precioso este acontecimiento: nuestra frágil y hermosa humanidad, en Jesucristo, ahora pasa a ser parte del misterio de la Trinidad.
Por ello, llama la atención que los textos no mencionen a las mujeres contemplando este misterio. La comunidad mateana (judeocristiana) que escribe el Evangelio, tan estructuradamente judía, y por tanto androcéntrica, evita nombrar a las mujeres. Pero vamos a decirlo claro, a creerlo y decirlo con fuerza: ¡Las mujeres estuvieron en la Ascensión del Señor, y es necesario hacer justicia con ellas! ¿Cómo iba a ser este un acontecimiento exclusivo para los varones? Y hay una razón muy simple y obvia: fue a ellas a quienes Jesús les dijo que fueran a Galilea, que allí lo verían, lo dice el mismo Evangelio unos versículos antes (Mt. 28, 10).
¿Cómo iba a ser este un acontecimiento exclusivo para los varones?
Así que, ni estaban solo los 11, como dice Mateo, ni eran solo los apóstoles, como dice Lucas en los Hechos, a menos que esté contando a María Magdalena y las otras mujeres como apóstalas también. Las mujeres también fueron testigas de la Ascensión y, con la fuerza de Ruah, fueron enviadas a dar testimonio del reinado de Dios hasta los confines de la tierra.
Siguiendo en diálogo entre el Evangelio y la primera lectura, encontramos dos preciosas perlas más…
Por un lado, contemplar y maravillarnos de la acción de Dios en Jesús desde su Resurrección a la Ascensión, que nos da pistas de su actuar en el mundo. Lo que Jesús Resucitado hace es: aparecer, probar con hechos que está vivo y seguir con el anuncio de que Dios reina en los corazones que se dejan habitar por su amor.
Y por otro lado, un detalle, que por lo menos para mí es el mejor recordatorio en los momentos más decadentes, desesperanzados y mortecinos, su promesa: “Yo estoy con ustedes, todos los días, hasta que se acabe el mundo”.
Varias luces en la palabra de Dios de este domingo, palabra viva para el hoy de nuestras vidas: justicia con la presencia de las mujeres, Dios está vivo, se aparece y reina a través de sus testigos/as que Le anuncian, hasta que se acabe el mundo.
Fuente: Mujeres Iglesia Chile. / Imagen: Pexels.
