La guerra mundial a pedazos evocada por el Papa Francisco implica a cientos de países con diversos grados de intensidad y a menudo es ignorada por los grandes circuitos mediáticos. Monseñor Redaelli: «El conflicto es la negación de la esperanza».
Como consecuencia directa de los conflictos bélicos murieron 170.700 personas (153.100 en 2022), mientras que 11.649 niños resultaron muertos o mutilados en 2023, lo que supone un aumento del 35% respecto del año anterior. Así se desprende del octavo informe de Cáritas Italiana sobre los conflictos olvidados titulado: «El retorno de las armas. Guerras de nuestro tiempo».
Actualmente hay 52 estados en el mundo que viven situaciones de conflicto armado. Y mientras que en 2022 había 55 naciones afectadas por la guerra, ahora hay más conflictos de muy alta y de alta intensidad. Los de muy alta intensidad, es decir, con más de 10.000 muertos, en el mundo son cuatro (había tres en 2022): los conflictos civiles de Myanmar, Sudán, el de Israel-Hamás y el de Rusia-Ucrania. Veinte en cambio son las guerras de alta intensidad, entre 1.000 y 9.999 muertos (fueron 17 en 2022).
Actualmente hay 52 estados en el mundo que viven situaciones de conflicto armado. Y mientras que en 2022 había 55 naciones afectadas por la guerra, ahora hay más conflictos de muy alta y de alta intensidad.
«Ya en 2014 el Papa, con motivo de su visita a Redipuglia, habló de una guerra mundial a pedazos. Tenía razón —dijo monseñor Carlo Maria Redaelli, arzobispo de Gorizia y presidente de Caritas Italiana—: el conflicto es la negación de la esperanza y un fracaso del intento de mediación. El Jubileo es un tiempo propicio para promover la justicia, la paz y la reconciliación. Como Iglesia y Cáritas —añadió— debemos ser protagonistas, constructores de puentes, promotores del diálogo, sembradores de esperanza, artesanos de paz». Monseñor Redaelli subrayó la importancia de la amplia presencia de la organización católica. «Caritas Italiana está en relación y en contacto con diferentes realidades. Por ejemplo, ahora mismo —explicó a los medios vaticanos— tenemos un operador en Damasco. Apoyamos a las agencias locales de Cáritas, con las que existe una excelente relación, e intentamos intervenir en las zonas más críticas».
La encuesta investigó la percepción de los italianos respecto de las guerras a través de un sondeo demográfico realizado por Demopolis. El 80% de los entrevistados considera que las guerras son acontecimientos evitables y el 74% no desea la intervención armada, sino simplemente el recurso a la mediación política. «Desgraciadamente, organismos internacionales como el Tribunal de Justicia o la ONU no tienen buena reputación en estos momentos, pero son el único camino a seguir. Hay que encontrar un equilibrio a nivel mundial sobre la base de la justicia y el respeto de los derechos de las personas», expresó el arzobispo.
Fuente: www.vaticannews.va/es / Imagen: Pexels.