Israel y palestinos han asistido en las últimas horas a la mayor escalada armada desde los enfrentamientos de 11 días que tuvieron lugar en mayo de 2021. Las incursiones israelíes, realizadas por segunda vez esta semana y de nuevo tras un ataque con cohetes, se concentraron en el centro de la Franja. Todo ello se produce después de los violentos enfrentamientos entre palestinos y policías israelíes de la semana pasada en la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén, que causaron decenas de heridos y suscitaron el temor a un nuevo conflicto, también porque se produjeron tras una serie de atentados terroristas el mes pasado. No es casualidad que en las últimas horas la policía israelí de Jerusalén haya impedido a los manifestantes judíos ultranacionalistas acercarse al barrio musulmán de la Ciudad Vieja para evitar nuevas tensiones.
LA PREOCUPACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS
El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, dijo estar “profundamente preocupado por el deterioro de la situación en Jerusalén”, y está en contacto con las partes para instarlas a “hacer todo lo posible por rebajar las tensiones y evitar las acciones incendiarias y retóricas”. Ayer, el Consejo de Seguridad de la ONU se reunió para discutir la violencia que estalló el pasado fin de semana. La reunión fue solicitada por China, Francia, los Emiratos, Noruega e Irlanda, y se celebró a puerta cerrada.
EL INTERCAMBIO DE ACUSACIONES
El brazo armado del movimiento islamista Hamás, que gobierna Gaza, disparó varios cohetes tierra-aire contra los aviones israelíes como respuesta, dijeron funcionarios de Hamás, y en respuesta los aviones israelíes atacaron el sur de la ciudad de Gaza. Tzahal, las fuerzas armadas israelíes, respondieron realizando bombardeos selectivos en la misma zona desde la que se dispararon los cohetes. Esto fue informado por testigos y fuentes de seguridad. Las incursiones israelíes, por segunda vez esta semana, se concentraron especialmente en el centro de la Franja y también alcanzaron una fábrica de armas. La tensión sigue siendo alta con motivo de la Pascua, que coincide con el mes sagrado musulmán del Ramadán.
LA AMENAZA IRANÍ
Mientras tanto, el presidente iraní Raisi amenazó a las autoridades israelíes a principios de esta semana. “Deben saber que su más mínimo movimiento no pasa desapercibido para las fuerzas armadas iraníes, y en caso de cualquier movimiento, el poder de nuestras fuerzas apuntará al centro de su régimen”, fue citado por la agencia de noticias Irna. Raisi condenó los recientes ataques con misiles israelíes contra posiciones militares sirias cerca de Damasco, comentando que “las fuerzas iraníes vigilan cualquier movimiento de las fuerzas israelíes y responderán”.
_________________________
Fuente: www.vaticannews.va