Se dirigen a la AUSJAL: “Solicitamos, humildemente, que se consideren oportunidades para recibir a estudiantes nicaragüenses en sus respectivas instituciones”.
Movimientos estudiantiles nicaragüenses pidieron el martes 29 de agosto a la Asociación de Universidades Confiadas a la Compañía de Jesús en Latinoamérica (AUSJAL) acoger en sus centros de estudios, de forma presencial o virtual, a los alumnos de la clausurada Universidad Centroamericana (UCA) en Nicaragua.
“Solicitamos, humildemente, que se consideren oportunidades para recibir a estudiantes nicaragüenses en sus respectivas instituciones, ya sea a través de programas de intercambio, becas o modalidades en línea”, abogaron los movimientos estudiantes a través de una carta pública.
La meta es que estos estudiantes de la UCA de Nicaragua “no solo puedan continuar con sus estudios, sino que también obtengan un título que esté a la altura de los estándares educativos y éticos que la Compañía de Jesús ha establecido a lo largo de su larga y prestigiosa historia”, agregaron.
La UCA, considerada uno de los últimos bastiones de libertad de pensamiento en Nicaragua, fue disuelta y expropiada el 17 de agosto pasado tras ser acusada por el Ministerio Público (Fiscalía) de ser un “centro de terrorismo”.
La UCA, considerada uno de los últimos bastiones de libertad de pensamiento en Nicaragua, fue disuelta y expropiada el 17 de agosto pasado.
El Gobierno nicaragüense publicó un día después en el Diario Oficial La Gaceta un acuerdo del Ministerio de Gobernación en el que se aprueba la cancelación de la personalidad jurídica de la UCA, otorgada el 13 de agosto de 1960.
Al menos 1.600 universitarios, de los más de 5.000 que tenía registrados la UCA en Nicaragua, han aplicado a las universidades jesuitas Simeón Cañas UCA de El Salvador, y Rafael Landívar de Guatemala, para intentar continuar sus estudios en esos centros de estudios, según autoridades de esas alma mater.
Ambas universidades forman parte de la AUSJAL, una red de 30 universidades jesuitas.
El martes 22 de agosto, alumnos de la UCA denunciaron que una universidad ligada al Ejército nicaragüense y que los había aceptado para continuar sus estudios, les retiró la matrícula sin ninguna explicación.
Al menos 600 universitarios se habían inscrito en la privada Universidad Americana (UAM), ligada al Ejército, pagado matrícula, arancel y habían iniciado las clases, cuando fueron notificados que no podían estudiar en esa alma mater, solo en la estatal Universidad Nacional “Casimiro Sotelo”, creada por las autoridades en reemplazo de la jesuita UCA.
En la carta, los movimientos estudiantiles reconocieron “las complicaciones logísticas y financieras” que puede implicar acoger a estudiantes nicaragüenses en otros países, pero se mostraron “convencidos de que las circunstancias demandan una respuesta audaz y compasiva”.
“Juntos, podemos ser un faro de esperanza en estos tiempos oscuros, un testimonio viviente del compromiso de la Compañía de Jesús con la justicia, la educación y la humanidad”, instaron esos grupos, entre ellos la Alianza Universitaria Nicaragüense (AUN), la Alianza de Jóvenes y Estudiantes Nicaragüenses (AJEN) y el Movimiento Universitario 19 de Abril.
Esos movimientos también expresaron su “más profunda solidaridad con la Compañía de Jesús, especialmente con los miembros de la UCA y los miembros de la Compañía de Jesús en Nicaragua, que han sufrido la persecución y la confiscación de sus instalaciones por parte de la dictadura de Daniel Ortega”.
Las relaciones del Gobierno del presidente Ortega y la Iglesia católica viven momentos de gran tensión, marcados por la expulsión y encarcelamiento de sacerdotes, la prohibición de actividades religiosas, y la suspensión de sus relaciones diplomáticas.
El Papa Francisco tildó de “dictadura grosera” al Gobierno sandinista en una entrevista con Infobae, señalando “un desequilibrio de la persona que dirige” el país centroamericano. (RD/EFE)
Fuente: www.religiondigital.org / Imagen: Pexels.