India y Sudán del Sur, en el horizonte inmediato del Pontífice.
Mientras el Vaticano trabaja a toda máquina para la visita que el Papa Francisco hará a Irak del 5 al 8 de marzo, la Santa Sede ya inició los preparativos para los otros destinos que el Pontífice tiene prácticamente confirmados este año: Grecia y Chipre, para una visita conjunta en mayo; y Hungría, para el último fin de semana de septiembre.
Siempre con un ojo en la evolución de la pandemia, el Vaticano empezó ya a trabajar una visita de al menos tres días a Grecia y Chipre, con eje en la cuestión migratoria, fuertemente querida por el Papa.
Además, informaron fuentes vaticanas a Religión Digital, la Santa Sede prepara la ida del Papa a la misa de cierre del Congreso Eucarístico que se hará en Hungría en septiembre.
La visita al país centroeuropeo, por el momento, duraría dos días y podría servir de base para un viaje relámpago del pontífice a otro Estado de la región.
Por otro lado, y siempre con atención a la evolución de la situación política, aún no está descartado que el Papa y el arzobispo anglicano Justin Welby puedan visitar Sudán del Sur entre octubre y noviembre.
Por último, en las últimas horas empezó a tomar cuerpo la posibilidad de una visita a India, luego de que el presidente Narenda Mori mostrara disponibilidad a extender una invitación oficial, algo a lo que no había accedido en 2018.
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Fuente: www.religiondigital.org