Un sentido llamamiento a los dirigentes políticos y a las autoridades religiosas para que no esperen más, sino que actúen para remediar la situación “antes de que se desate un tsunami que pueda arrollarnos a todos”. El cardenal Louis Raphaël I Sako, Patriarca de Babilonia de los Caldeos, elige una expresión fuerte para comunicar todo el dramatismo de la situación que vuelve a agitar el espectro de una guerra civil en Irak, en un comunicado emitido el 31 de julio desde la residencia de verano del Patriarcado en Ankawa, un suburbio de Erbil, y citado por la agencia de noticias Fides.
ELIMINAR LAS CAUSAS DE LA “CORRUPCIÓN E INJUSTICIA”
“El país se encuentra en una fase incandescente marcada por el bloqueo del marco político y por la salida a la calle de los desempleados y los pobres”, dijo el Cardenal, haciendo un llamamiento a toda la sociedad para remover las causas profundas y estructurales que generan este caos y reconocer el fracaso del sistema político basado en la distribución de los cargos políticos e institucionales sobre una base sectaria. El enfoque sectario y el llamado “sistema de cuotas”, según el Patriarca, son la raíz de la injusticia y la corrupción. Por lo tanto, se necesitan “nuevos enfoques y nuevas formas” para crear un sistema eficiente que realmente sirva a los ciudadanos y no a los intereses partidistas.
El enfoque sectario y el llamado “sistema de cuotas”, según el Patriarca, son la raíz de la injusticia y la corrupción.
LA OCUPACIÓN DEL PARLAMENTO Y LAS PROTESTAS
La escalada de la crisis comenzó con una protesta de los partidarios del líder chiíta Moqtada Sadr contra la candidatura de un primer ministro propuesto por facciones rivales. La coalición retiró a sus representantes elegidos de la Asamblea Parlamentaria, movilizando a la masa de partidarios para exigir nuevas elecciones e impidiendo de hecho la formación de un nuevo gobierno. El domingo 31 de julio, los militantes de la coalición política dirigida por el líder chií ocuparon el Parlamento; esta acción de fuerza fue contestada por los militantes de los partidos chiíes proiraníes, que han promovido manifestaciones y concentraciones permanentes en los alrededores del Parlamento desde el lunes 1 de agosto. El martes 2 de agosto, los sadristas pidieron a sus partidarios que se retiraran del Parlamento de Bagdad y que siguieran protestando en sus alrededores, en la llamada “zona verde”, donde se encuentran las principales instituciones gubernamentales y varias embajadas, y donde han convocado una gran oración comunitaria para el viernes.
LA REUNIÓN ENTRE EL PATRIARCA SAKO Y EL PRIMER MINISTRO AL-KADHIMI
El 24 de julio, el cardenal Louis Raphaël I Sako, acompañado por el obispo auxiliar monseñor Basel Yado, fue recibido por el primer ministro iraquí Mustafa Al-Kadhimi. El sitio web del Patriarcado Caldeo informa de ello. En esa ocasión, el primer ministro reiteró que la coexistencia pacífica entre el pueblo iraquí es el pilar de la paz civil, y recordó que la firme hermandad entre los hijos de Irak es la meta, el objetivo y el fundamento de todos los iraquíes, y también que la diversidad es una riqueza social.
UN ESTANCAMIENTO POLÍTICO DE MESES
De hecho, con las elecciones parlamentarias del 10 de octubre de 2021, el país entró en una situación de crisis. De las encuestas salió la clara afirmación de la alianza liderada por al Sadr, que había obtenido 73 escaños de 329, y un retroceso igualmente neto de los partidos chiítas pro-iraquíes, que contestaron inmediatamente los resultados. La comunidad internacional lo ha seguido de cerca: Francia ha expresado su preocupación y ha pedido moderación en la negociación de un acuerdo.
Fuente: www.vaticannews.va