Revisa las publicaciones recomendadas del mes en Revista Mensaje, reseñadas por algunos de nuestros destacados colaboradores.
Supuestos para un diálogo – Precisando fronteras. Cristián Sotomayor S.J. Ediciones UC, Santiago 2020, 412 páginas.
Estas páginas son uno de los muchos frutos del itinerario de su autor en la enseñanza de la teología a estudiantes de distintas carreras en la Universidad Católica de Chile. El suyo es un esfuerzo por mostrar la teología como ciencia y quehacer a personas formadas en otras disciplinas, en otros contextos epistemológicos, en otros mundos. Este contexto de origen determina el propósito central del libro, ya declarado en el título general: una invitación al diálogo.
Por cierto, todo diálogo debe tener puntos de apoyo y a la búsqueda de estos se dirigen los esfuerzos de Cristián Sotomayor S.J., enmarcados en lo que llamamos “teología fundamental”. Básicamente, su objetivo es ayudar al interlocutor a reconocer el carácter razonable de la fe y su (potencial) relevancia en la existencia humana. Dicho de otro modo: mostrar que pertenecemos a una tradición para la cual la fe no es un mero sentimiento piadoso, sino una convicción que puede y debe ser pensada.
La estructura del libro refleja esa motivación. En el capítulo 1, como punto de partida, está el planteamiento de aquello a tratar. Es “la cuestión de Dios”. ¿En qué sentido la vamos a entender? Es una pregunta realmente interpeladora, no retórica. A fin de abordarla con seriedad, invita a conocer algunos grandes planteamientos de esta cuestión en la historia, sin eludir ninguno ni anticipar juicios de valor. Invita a conversar en serio a partir del conocimiento reflexivo de ciertos elementos mínimos, poniendo sobre la mesa los planteamientos filosófico, religioso, ateo, agnóstico y deísta de la “cuestión de Dios”.
Un segundo gran momento (capítulo 2) es conocer y analizar diversas propuestas de abordaje a la señalada cuestión, atendiendo a que esta se define, finalmente, en la forma en que el ser humano puede “acceder” a Dios, en el supuesto de que es Él mismo quien “se le hace presente […] en distintas experiencias humanas” (p. 15). El autor parte refiriéndose al acceso de la mentalidad mítica y luego, en el plano de las búsquedas filosóficas, hace una opción, destacando a Anselmo y Tomás de Aquino, y luego al teólogo alemán Karl Rahner (1904-1984), representante eminente de un pensamiento de tradición neoescolástica abierto a los impulsos de la filosofía moderna y contemporánea. Termina el capítulo mostrando la forma religiosa del acceso a Dios, como respuesta a una experiencia teofánica, es decir, de una automanifestación de Dios en cuanto tal. Como especificidad del cristianismo, se presenta a la persona de Jesús como el culmen de toda experiencia teofánica.
El tercer y último paso (capítulo 3) consiste en un abordaje al tema de la “recepción” de Dios por parte del ser humano, desde la experiencia, atestiguada en los textos que conforman la Biblia, de que Dios se ha manifestado en cuanto tal, es decir, “teofánicamente” en la historia y ya no en los parámetros de la representación mítica, que se basa en una separación radical de lo sagrado y lo profano. El gran aporte del tercer capítulo es, precisamente, mostrar cómo puede el ser humano, desde su concreta e inalienable humanidad e historicidad, reconocer al Dios manifestado en Jesucristo, vincularse con él y, finalmente, responderle en libertad, manifestando así que ese encuentro tiene, también necesariamente, consecuencias existenciales.
Para terminar, una alusión a los anexos del libro. La publicación tiene 405 páginas, 124 de las cuales, es decir, una proporción más que considerable, contienen 24 anexos y la bibliografía. Esto dice mucho sobre esta obra y confirma lo que ya hemos destacado acerca de su propósito central: establecer un diálogo como camino de un posible encuentro, a partir de ciertos supuestos mínimos que es necesario delimitar y conocer. ¿Cómo podemos establecer esos supuestos? La respuesta de este libro es que ello será posible en el diálogo mismo, entendido como un proceso en que el aprendizaje no será el resultado de un mero “trasvasije” de conocimientos desde un profesor, sino de un esfuerzo compartido en la conversación y en la lectura reflexiva de textos escogidos.
Fernando Berríos
Teoría triangular del desarrollo: Pensamiento y 40 factores del buen vivir. Esteban Valenzuela Van Treek. Ediciones U. de Concepción, 2020, 152 páginas.
Este libro es una valiosa propuesta para pensar en un desarrollo diferente bajo el enfoque triangular. Se trata de un legado importante, que traspasa experiencias y reflexiones. Lo ha venido macerando el autor a través de su vida intelectual y política. Están acá su compromiso ético, su razón y sus creencias, que son incorporadas, pues han formado una cierta visión de conjunto que permiten observar el futuro como una trenza tridimensional, ajustada, firme, donde cada vuelta de hebra es bien amarrada y colorida, tal como lo son los colores, de los huipiles mayas, en Guatemala y México, o los ponchos mapuches o aymaras, las telas trabajadas laboriosamente en Ecuador y Bolivia. El libro es un diálogo con el pensamiento social y ambiental. Está la decolonialidad latinoamericana. También, el rescate de las cosmovisiones de estos pueblos, profundo y firme, como el árbol sagrado de los mayas, la ceiba.
En coherencia con lo anterior, recupera valores anclados en la modernidad, como la libertad, la justicia, la fraternidad, la convivencia, el respeto al medio ambiente, la biodiversidad, el pluralismo.
Aborda dimensiones clave de la temática territorial: la descentralización, el confederalismo, las formas de autonomía indígena, el empoderamiento de la sociedad civil, la participación y el control social. Da y entrega un ideario programático concreto para repensar el modelo de desarrollo. Demuestra un manejo conceptual y teórico de muy buen nivel desde diversos ámbitos, proponiendo un camino de solución. Destacan los valores genuinos de la Democracia esencial, la Libertad, la Igualdad y, particularmente, la idea de que sin fraternidad no hay confianza.
Se aborda la dimensión confederal de las democracias avanzadas. Entre ellas, el parlamentarismo, el comunalismo y el poder regional. Aboga por partidos políticos sanos, empresas veraces y valoradoras. Y por un Estado que administre el bien común de los recursos naturales. Igualmente, defiende una sociedad civil empoderada, participativa, que pide rendición de cuentas.
Su militancia verde sugiere el giro cosmocéntrico en relación equilibrada de los hombres con la naturaleza y los animales. Alude a Laudato Si’ del papa Francisco. Deja al desnudo el estilo de desarrollo predominante, basado en el extractivismo y la depredación que se reflejan con mayor crudeza en el actual contexto de pandemia. Propone una agenda concreta de economía verde y defensa de la biodiversidad, enfatizando un enfoque territorial.
Recupera el pensamiento ancestral. Rompe con el pensamiento binario, racionalista e instrumental que se sitúa hoy como única visión del desarrollo. La idea de pensamiento «y», en vez de polarizar dos factores, integra tres. Efectivamente, tras leer este libro se comprende más que el buen vivir que propician los pueblos/naciones indígenas parten de una mirada amplia hacia la complementariedad y la corresponsabilidad. Para finalizar, cito textualmente al autor con su interpelación al viraje personal para transformar: «Trece dimensiones por tres factores suman 39 y esta es la ley 40 para cumplir la promesa del título. Si ha llegado hasta aquí, se puede decir que “somos” pensadores integradores, que no tenemos ortodoxias, y de manera dialógica podemos seguir integrando factores que suelen oponerse en conversaciones cotidianas y en la política a gran escala. En la propia pandemia se dice: activación económica o salud, poder central o territorial, cuarentena total o mayor cantidad de tests, nacionalismo o colaboración mundial, autocuidado o control estatal férreo. Las falsas dicotomías destruyen y hacen ineptas políticas sin la debida integralidad aplicación heterodoxa de soluciones. A leer (veo), discernir (juzgo) y aplicar (actúo) con Y. La invitamos a seguir utilizando esta herramienta “antigua”, imbricada en muchas tradiciones indígenas, cristianas, racionalistas, modernas y posmodernas, para mejorar nuestro caminar “juntos” y cosmocéntrico, para un Buen Vivir corresponsable. La Teoría Triangular está para criticarla, rehacerla y en algunos casos, espero, aplicarla».
Héctor Oyarce E.
Religión y juventud. El impacto de los cambios socioculturales en los procesos de transmisión de la fe. Luis Bahamondes, Nelson Marín, Luis Aránguiz y Florencia Diestre. Universidad Alberto Hurtado, Santiago, 2020, 198 páginas.
La literatura en Chile acerca de los mundos juveniles, elaborada desde perspectivas sociales, culturales o políticas, ha sido prolífica en las últimas décadas, pero no lo ha sido tanto la que aborda su religiosidad. Por ello, toda contribución a la generación de nuevo conocimiento en la materia es valiosa. Y lo es más aún si se realiza fundamentada en investigaciones empíricas que permiten conocer con profundidad la fe juvenil desde los mismos actores, como es el caso de este libro.
Los autores han indagado en una cuestión específica dentro de esta temática general, a saber, la transmisión intergeneracional de la fe católica en el contexto de los cambios socioculturales que ha vivido la sociedad chilena a partir de 1990. Lo hacen motivados por el interés de la Compañía de Jesús por comprender mejor esta temática, en vistas a fortalecer su rol educativo tanto a nivel escolar como universitario.
Para lograrlo realizaron, entre abril y diciembre de 2017, una investigación cualitativa con jóvenes católicos tanto de colegios católicos (7° y 8° básico, III y IV medio) como de universidades públicas y privadas de la Región Metropolitana, y también con sus padres. A través de entrevistas personales semiestructuradas y grupos de discusión, los investigadores exploraron las características del hecho religioso en el mundo de hoy; las conceptualizaciones y los imaginarios en torno a la fe (qué la constituye y cómo incide en la vida); las prácticas y los contextos asociados a ella; y su transmisión intergeneracional (mecanismos y dificultades).
Tal como lo explicita el subtítulo de la obra, el foco está puesto en el impacto de los cambios socioculturales en los procesos de transmisión de la fe. Podríamos precisar: de la fe católica. Dado lo anterior, los autores comienzan describiendo, en una bien lograda síntesis, las principales características de la vida social y cultural en Chile a partir del retorno a la democracia. Ello les permite evidenciar cómo esta moldea la religiosidad actual: «El debilitamiento de los imaginarios tradicionales de chilenidad, de comunidad política y la necesidad individual de diseñar la identidad, han afectado a los vínculos de las personas con la religión y sus expresiones institucionales. Al contrario de las predicciones de los teóricos de la secularización, la religión no desaparece, sino que se modifica su imagen».
A la luz de esta contextualización, los autores luego analizan, ayudados en cada caso de un elaborado marco de referencia conceptual, los imaginarios juveniles vinculados a la fe, la Iglesia y la transmisión de la fe. Presentan además un análisis específico respecto del rol de la familia y de las instituciones educativas en el proceso de transmisión, desarrollo y pervivencia de la fe católica. El texto concluye con una valoración de la enseñanza religiosa (en su sentido amplio) en las escuelas católicas y con una síntesis y recomendaciones para fortalecer la transmisión de la fe en el contexto de establecimientos educacionales católicos, particularmente de la Compañía de Jesús.
La lectura del texto es sugerente. Pone al lector en contacto con las actuales perspectivas teóricas respecto a los diversos temas abordados y, al mismo tiempo, aunque en menor medida, con la voz de los jóvenes en torno a ellos. Además, invita a continuar la reflexión, tanto a nivel académico como práctico. Un diálogo interdisciplinar en torno a los resultados podría haber entregado pistas que parecen necesarias para precisar algunos conceptos utilizados o para asumir perspectivas alternativas más allá de la institucional, en vistas a acercarse al fenómeno desde ángulos complementarios. El tema es ciertamente apasionante y complejo, del cual aún nos queda mucho por aprender. Este libro es ciertamente un valioso aporte a dicho desafío.
Catalina Cerda Planas