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Los distintos gobiernos europeos aún no han llegado a un acuerdo sobre el nuevo pacto sobre gestión de los inmigrantes y el asilo. Las negociaciones en Bruselas se vieron condicionadas por las tensiones entre Italia y Alemania sobre las actividades de las ONG en el Mediterráneo, donde, según la ONU, se ha producido una nueva oleada de migrantes muertos o desaparecidos.
El jueves 29 de septiembre en Bruselas, un acalorado debate entre Italia y Alemania sobre las actividades de las organizaciones no gubernamentales en el Mediterráneo central. La situación ha provocado el bloqueo del nuevo Pacto Europeo sobre las migraciones.
La propuesta de compromiso presentada por los españoles parecía haber convencido a Berlín, pero los delegados italianos en el Consejo de Asuntos Internos de la UE señalaron que, mientras se mediaba en Bruselas, siete embarcaciones pertenecientes a ONG se encontraban en el tramo de mar entre Sicilia y el norte de África y que cuatro de ellas enarbolaban bandera alemana y se dirigían en su mayoría a puertos italianos. También el jueves, a la misma hora, en Berlín, el ministro italiano de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, se reunió con su homóloga alemana, Annalena Baerbock, confirmando los temores del ejecutivo de Roma. Esta situación “está demostrando que hay algo que no funciona”, explicó Tajani, “el desacuerdo se mantiene, pero dentro de una antigua relación de amistad entre nuestros países y, por supuesto —subrayó—coincidimos en la idea de que ahora es necesaria una solución europea y que debemos colaborar”.
Delegados italianos en el Consejo de Asuntos Internos de la UE señalaron que, mientras se mediaba en Bruselas, siete embarcaciones pertenecientes a ONG se encontraban en el tramo de mar entre Sicilia y el norte de África y que cuatro de ellas enarbolaban bandera alemana y se dirigían en su mayoría a puertos italianos.
Según fuentes gubernamentales italianas, la reunión entre los delegados de los distintos países europeos se interrumpió y aplazó cuando se propuso una enmienda que exigía que los migrantes fueran acogidos por el país de bandera del barco que los transporta. Una forma de dejar claro que “si Alemania se solidariza con el trabajo de sus ONG”, debe acoger a los migrantes transportados. Mientras tanto, la ONU certifica que el aumento de las partidas ha provocado un incremento del número de víctimas de naufragios. El director de ACNUR informó que desde principios de año, más de 2.500 personas han muerto o están desaparecidas en la travesía del Mediterráneo, 700 más que en el mismo periodo de 2022.
Fuente: www.vaticannews.va/es / Imagen: Pexels.
