La democracia hoy se aprecia menos y hay grupos que, desde dentro del sistema, podrían atenuarla o suprimirla. Es necesario reaccionar a nivel de gobierno, parlamento y partidos políticos, también colegios y barrios.
El año 2025 las coaliciones políticas tendrán por delante el reto de responder a una ciudadanía con una progresiva desafección entre sus representantes y la sociedad.
Importa una buena administración de gobierno, pero se requiere también un trabajo de análisis, debate y definición de alianzas que tenga en consideración una perspectiva de más largo plazo: para eso, no basta abordar las diferencias de enfoque generacional y partidista.